Como suele suceder, todo en su justa medida es bueno. Las nuevas tecnologías, las redes sociales, facilitan la comunicación entre las personas, hay acceso a datos en tiempo real de otra forma serían impensables, ej. cierto evento, reuniones en el cole, festivales, cumples, etc. Esta es la parte buena, la que facilita, acorta los tiempos, ayuda con la organización diaria, permite mantenerse en contacto con otras madres y padres. Otra cara de la moneda es que a veces se le dedica demasiado tiempo al chat, lo cual va en detrimento de la atención a los propios niños. Los corrillos escolares pasan a instalarse en las redes sociales y pueden llegar a ser interminables, lo que no trae beneficio ni a pequeños ni a mayores.
Es importante gestionar bien esta herramienta, ya que de esta forma se le puede quitar mucho provecho. Como pautas interesantes podemos comentar algunas:
-Educación y respeto.- Básicos, ya que si fallan es imposible un diálogo productivo, constructivo y enriquecedor, donde todos salgan ganando.
-Contenidos.- Mejor centrarse en el hecho concreto y del cual se necesite tener información o hacer algún comentario, que no estar chateando porque sí, sin tener nada que aportar en ese momento.
-Finalidad.- Las responsabilidades de los niños deben seguir siendo de ellos, ya que practicando es la única forma en que aprenden a plantearse objetivos, trabajar para la consecución de los mismos y asumir las consecuencias de sus actos, aprendiendo así a tomar buenas decisiones.
-Evitar el conflicto.- Siempre va a ser más positivo tener una comunicación adecuada y centrada en cualquier tema que corresponda, que no entrar en polémicas innecesarias o formar pequeños grupos dentro del propio grupo, ya que la comunicación se puede viciar y perderse la finalidad para la que se había formado el grupo inicial, lo cual mermaría mucho el partido que se le pudiera quitar.
-Cuestiones a resolver en el colegio.- Hay temas, como entrevistas con profesores, tutores, etc. que deben tratarse en entrevistas personales; por lo tanto no es adecuado entrar en ciertos comentarios que tal vez puedan ser malinterpretados en el grupo dada la falta de detalles de la comunicación escrita con brevedad.
-Ansiedad.- Cuando el grupo o la participación en el mismo está causando malestar, inquietud, pérdida de tiempo innecesario, hay malos rollos, se pierde el hilo central, existen polémicas o sectores divididos… Es decir, que pesa más lo negativo que lo positivo, si no hay alternativa a la vista, sino se le ve perspectiva de mejora, cuando la finalidad de quitar algo productivo se ha perdido, tal vez es hora de valorar pros y contras, dejando como última opción darse de baja en el grupo. Si decidimos marcharnos que sea sin sentirse culpables, no dejamos a nadie, sólo un chat, siempre con educación y respeto hacia los demás.
MARÍA PILAR FUENTE
PSICÓLOGA