Muchas veces, por desgracia, escuchamos noticias terribles de mujeres que han perdido la vida a manos de sus parejas, hombres, que en algunos casos son capaces también de acabar con la vida de sus hijos, y hasta con la suya propia. En estos casos la violencia es extrema.
Pero hay casos cotidianos, situaciones del día a día, donde los micromachismos están presentes. Es que forman parte de la sociedad y como tal, los seguimos practicando, no sólo hombres, también las mujeres, educamos en el machismo. Venimos de una tradición judeo-cristina con fuerte arraigo del patriarcado y eso sigue respirándose en las relaciones de todo tipo, familiares, laborales, amistad, pareja, de todo tipo.
Al ser el entorno que nos envuelve, y que siempre ha sido, con frecuencia no nos damos cuenta, ya que hemos normalizado situaciones, comentarios, pautas, reacciones, que en realidad no son tan sanas, ya que perjudican a cierta parte de la población y lo que es peor, no favoreciendo a la otra en el fondo, ya que la sociedad se desequilibra, nadie está bien. ej. si un marido tiene comportamientos machistas con su pareja, la relación no andará bien, lo cual le afecta directamente al varón.
Por eso el cambio es necesario desde los hombres y desde las mujeres, desde toda la población, y en los distintos escenarios sociales. Necesitamos ser más conscientes, tener una mirada más crítica porque sólo así podemos construir un mundo más equitativo, más pacífico, más equilibrado. Y esto redunda en todo, si vivimos en paz en casa, lo haremos en el exterior, y en los países, en el mundo ¿Acaso no necesitamos paz?
MARIA DEL PILAR FUENTE. PSICOLOGA COLEGIADA G-04034
CENTRO SANITARIO C-15-003650
MASTER Y CLINICA EMDR. TRAUMATERAPIA. PSICOTERAPIA