No es infrecuente este dilema. Por un lado, sabemos que tenemos temas a tratar, malestares que sanar, asuntos pendientes que resolver, y que nos están quitando la paz. Esto aún en el mejor de los casos, porque es muy común, lamentablemente estar mal sin saber por qué.
Cuando tienes algo de conocimiento de ti mismo y sabes que algo no anda bien, que necesitarías revisar alguna cuestión, ya es un avance. Pero aún el caso de quien ignora de donde vienen sus malestares, se pueden resolver, claro que con mayor trabajo, ya que hay que avanzar desde lo básico, lo remoto.
Desde esta posición de desconocimiento total es común tener miedo, las preguntas surgen, ¿Qué me puedo encontrar en mi interior? Como si estuviera lleno de monstruos ese espacio negro e insondable que es el desconocimiento interno. Con frecuencia suele suceder lo contrario, que uno se encuentra a sí mismo, y hace las paces consigo mismo y con su historia de vida, e incluso transgeneracional. ¡Por fin la cosas están en su sitio! ¡Qué alivio!
Por este mismo motivo, a veces se teme la introspección, mirar hacia dentro, hacer psicoterapia, simplemente por puro desconocimiento. En el momento que descubres que en realidad se trata de intimar contigo, de cuidarte, de darte salud, bienestar, de encontrar tu sitio en la vida, la visión cambia totalmente. Es más, hacer psicoterapia es para las personas más sanas, que se cuidan y miran por avanzar en la vida, dejando atrás momentos de dolor, atasco, desolación o relaciones infructuosas que te llevan una y otra vez al desánimo. Esto no quiere decir que no aciertes y te equivoques en la vida, como todo ser humano, sino que aprendes de tus errores y evolucionas, porque asumes la responsabilidad de tus actos y tomas nota de lo que te funciona y de lo que no. Siempre mirando hacia dentro, dentro del contexto que te rodea. “Yo soy yo y mis circunstancias” José Ortega y Gasset.
Sólo se puede vivir plenamente desde la consciencia, porque desde la inconsciencia todos son tropiezos. Es como estar dormido y despertarte. ¡Vida solo hay una! ¡Deja los miedos y da el paso adelante!
María Pilar Fuente Psicóloga Coleg G-04034
Centro Sanitario C-15-003650 y C-15-004977
Máster y Clínico EMDR. Terapeuta Familiar Sistémica.